SCHNEIDER! (PARTE 3)

Schneider 3

Como tengo la suerte de poseer los libros de cría de Alarcón, he dedicado muchas horas estudiando la forma de trabajar del maestro.
Lo primero que hice fue construir el árbol genealógico de los tres banderas iníciales para ver de qué forma estaban hechos. Compruebo que los tres tienen atrás, en sus antecesores, a dos hembras , hermanas, ya criadas por Alarcón. La 106 y la 107 del año 1985 que vienen en cuarta generación de pájaros de Schneider, aparecen por parte de padre y de madre.
Naturalmente en los árboles genealógicos aparece la anilla de su amigo el Sr. Hermida que tenía los mismos gustos que Schneider y le servía como complemento a su trabajo y para no cerrarse en consanguinidad, ya que criaba lo mismo que él.
Le explico esto porque Alarcón tenía muy claro que sólo no podría crear los roller que soñaba y mucho menos mantenerlos en el tiempo. Ya tenía los pilares pero el trabajo acababa de empezar.
No tardó mucho en confirmar que su método de trabajo era adecuado, todos los años destacaban sus canarios en los concursos, y fue en 1992 a los tres años de tener sus pilares, cuando pasó todas las barreras. Sus canarios estaban hechos y fijados con unas características distintas a los Schneider originales, ahora predominaba la nota reina, el holrrol, eran canarios sin espinas, limpios con música, voz y naturalmente con fuerza como sello característico de la estirpe. Pero en el año 1996, justo a los cuatro años, cuando cerró en consanguinidad ( cuarta generación del padre por cuarta generación de la madre ), consiguió la élite. Fueron sus dos mejores años sin desmerecer al resto, que en total fueron 35
La partitura de la canción, la musicalidad, la voz y el motor de sus canarios, junto con su gran conocimiento del canario Roller, le llevaba a discrepar con otros jueces que en aquellos tiempos estaban dentro de las cabinas. Dejó de asistir a los concursos y desde ese momento los criadores que realmente queríamos al Roller, no tuvimos más remedio que ir todos los años a su casa para seguir admirando y aprendiendo de esos extraordinarios ejemplares, y de su criador.
En los meses de escucha, pasaban por la cocina de su casa, criadores de todas partes de España. Cada semana íbamos de una región distinta. Y estas visitas las aprovechó el maestro para encontrar un equipo de criadores que quisieran trabajar en el mantenimiento de la estirpe siempre en pureza de sangre
Repartía sus maravillosos ejemplares (sin cobrar nada)
Apartaba los que necesitaba él para criar y el resto se los daba, a escoger , a todos sus amigos. Naturalmente no de forma aleatoria, lo hizo con la intención de que aunque viviéramos a muchos km. de distancia, nos necesitáramos unos a
otros. Era una forma de fomentar la amistad entre criadores y que el trabajo se hiciera en equipo.
Los camellos se los daba a los criadores de Madrid
Los Calés se fueron para Andalucía ( Utrera y Écija )
Y los de la línea 7 se fueron a Sevilla
Principalmente y en cantidad de ejemplares, fueron estos tres lugares los que Alarcón pensó que podían servir. Aunque fueron muchos más los criadores que se levaron pájaros de su criadero.
Pero no contó con algo, aunque yo pienso que este reparto era la prueba de fuego que nos puso a todos como examen.
Las vanidades humanas y la falta de humildad de las personas hizo que sus planes no llegaran a buen término. Los criadores pensaron que iban a obtener buenos resultados solos por su cuenta y no criaron en equipo con los demás. Los resultados no tardaron en aparecer. Sólo se oían buenos ejemplares en la cocina de Alarcón, en el resto de España no salía nada a pesar de tener buenísimos ejemplares.